Para mí y mi familia, nuestra tradición gira en torno al nacimiento de Jesús.

Su nacimiento significa el nacimiento de una nueva vida y un mensaje renovado de esperanza.

Desde que era pequeño, cada 24 de diciembre era una celebración.

Mi familia y yo conduciríamos 2 horas hasta la ciudad natal de mis padres.

Ve a la casa de mis abuelos y sal a tocar las campanas de todos nuestros primos para ir a jugar a la calle.

Mi mamá, mi abuela y mis tías, preparando las ensaladas. El abuelo y los varones adultos, custodiando la parrilla.

Todos fuimos a misa y después de la celebración:

-¡Banquete!

Comíamos, bebíamos Coca-Cola (era un lujo en ese momento) y jugábamos un poco más con nuestros primos.

A la medianoche, todos los niños corren hacia el árbol de Navidad para abrir los regalos.

Jugué con los juguetes nuevos hasta que llegó el momento de ir a la casa de los otros abuelos y abrir más regalos allí.

La víspera de Año Nuevo fue la misma pero comenzando en la casa de los otros Abuelos.

Fue un momento de alegría y familia.

En el mundo de hoy vemos mucho odio debido a la religión.

Hay fanáticos en cada uno que intentan convencer al otro de que es malvado.

Pero a pesar de ellos, creo firmemente que el mundo está lleno de gente de buena voluntad.

Tengo muchos amigos fantásticos que profesan casi todas las religiones.

Durante esta temporada, mi deseo es que todos tengan paz, salud y amor para compartir con sus familias.

Si lo celebras, ¡Feliz Navidad!